La sexta edición de la Feria del Comercio de Villacañas ha demostrado un año más su consolidación como el referente anual del sector en el municipio, una cita en la que el comercio local se muestra unido y atrae a los stands participantes a centenares de personas, vecinos muchos de Villacañas pero también de municipios de la comarca que se acercan a la localidad atraídos por los productos y la profesionalidad que los comerciantes ofrecen durante todo el fin de semana. Una actividad que promueve la Asociación de Comerciantes y Profesionales de Villacañas (ACOPROVI) en colaboración con el Ayuntamiento, que ha dinamizado durante dos días la actividad local, sobreponiéndose incluso a la presencia intermitente de la lluvia, especialmente en la tarde del sábado. Al cierre de esta sexta edición, las notas positivas fueron destacadas por la organización y por los propios visitantes, a la espera de realizar una valoración más profunda sobre la Feria.
Tanto el presidente de ACOPROVI, Víctor Huertas, como la concejala de Industria y Comercio, Mª Mar Muñoz, han destacado el trabajo realizado por todos los comerciantes participantes, valorando la iniciativa como positiva, tanto como una herramienta de venta pero también y, en muchos casos con mayor importancia, como un evento de promoción para seguir dando a conocer el sector comercial villacañero en su apuesta por la calidad, los precios ajustados y la profesionalidad.
La última jornada de la Feria se cerró con los diferentes sorteos y con un emotivo homenaje al comerciante jubilado de mayor edad, Julián Pérez Montes, que trabajó toda su vida en este sector. Empezó en el 43 en casa Calderón, donde siguió unos años tras el paréntesis obligado por el servicio militar. Abriría después su negocio propio en la calle Sevilla, que comenzó siendo una tienda de ultramarinos que convirtió en autoservicio en el año 1969. En esa tienda inició también su negocio de venta de seguros, que le llevaría finalmente a cerrar la tienda para dedicarse completamente a los seguros en una nueva ubicación en la avenida de La Mancha, hasta su jubilación.
Recibió una placa de homenaje, que recogió muy agradecido, recibiendo además muchas felicitaciones de familiares y amigos. Tuvo además palabras especiales y muy cariñosas para dos personas que trabajaron con él en la tienda, Julián Díaz-Rullo primero y Javier Díaz Sánchez después.
En cuanto a los sorteos, Cruz Roja sorteó dos lotes de productos entre los que colaboraron con la compra de papeletas de la ONG. Los números ganadores fueron el 3.165 de las papeletas amarillas, y el 4.481 de las verdes. Por último, se sortearon tres premios económicos entre las cartillas que se rellenaron por la compra de al menos cinco productos en la Feria.